Los tackles centrales Gabe Watson (98) y Bryan Robinson (97) se preparan para uno de los ultimos intentos al borde de la linea de anotacion el domingo contra Houston.
Â
Â
Perdido continuamente entre un montĂłn de cuerpos y por consecuencia perdido para cualquiera que ve el juego, la importancia del hombre grande en el centro de la lĂnea defensiva tambiĂ©n puede pasar desapercibida.Â
Â
Pero aquĂ es donde cada jugada comienza, con la entrega del balĂłn y el control del centro.
"Es como el punto cero (de cada jugada)," dijo el tackle central Gabe Watson. "uno hace el contacto mĂĄs rĂĄpido que los demĂĄs, es mĂĄs importante que en cualquier otro lugar porque existe muy poco tiempo para reaccionar."Â
Â
Las anclas de la lĂnea se vistieron de gloria en el triunfo del domingo, gracias a la detenciĂłn al borde de la lĂnea de anotaciĂłn al final del partido. En total, los Cardenales enfrentaron un total de 11 jugadas ofensivas de los Texanos cuando Houston necesitaba solo una yarda para el primero y diez o un touchdown. La defensiva de Arizona los detuvo en siete de ellas.
  Â
"Honestamente es mi parte favorita del juego," dijo Watson. "La mayor parte del tiempo estas tu contra ese hombre. Y si es tercera-y-1, cuarta-y-1 y el juego estå de por medio y te empujan hacia atrås, todos los sabrån, 'El centro echó para atrås a Gabe Watson.' "
Â
El compañero Bryan Robinson tackle central dijo que ganar tal batalla "es como enfrentar la misma embestida que sà estuvieras anotando con la ofensiva."
Â
Los Cardenales comprimieron al corredor de los Tejanos Steve Slaton en tercera-y-1 en el segundo cuarto para forzar el despeje, y después lo hicieron dos veces consecutivas contra Slaton en segunda y tercera oportunidad al inicio del tercer periodo, obligando a un pase incompleto en cuarta oportunidad.
Â
Los Tejanos ganaron la siguiente ronda, convirtiendo en tres jugadas, incluyendo corrida de una yarda del acarreador Chris Brown por el centro para una primera oportunidad de Houston.
Todo esto nos llevĂł al momento crucial.Â
Â
Durante las impredecibles tres-oportunidades-desde la yarda 1 de Arizona al final del partido, la lĂnea consiguiĂł aguantar a Brown en segundo intento, y luego mantuvieron la respiraciĂłn mientras el ala cerrada Joel Dreessens saliĂł del terreno en el tercer intento en una jugada de pase.
Â
Luego Brown regresĂł al juego, y Robisnon lo advirtiĂł.
Â
"Yo y Gabe hablamos al respecto, 'Van a ejecutar la misma jugada,' " dijo Robisnon. "En ese momento lo recordamos, y era solo una pulgada lo que hacia la diferencia con la primera oportunidad en la que el anotĂł."
Â
El entrenador en jefe Ken Whisenhunt elogiĂł a Watson en particularmente en la Ășltima jugada por mostrar buena tĂ©cnica ya que fue Watson quien presiono en el saque â con Robinson despejando el centro por la parte baja y Darnell Dockett descargando por el lado izquierdo â lo que extinguiĂł la Ășltima jugada de Brown. Â
Â
Watson bromeo sobre como uso cada parte de su cuerpo â incluyendo sus extremidades inferiores â para intentar y cubrir todas las ranuras en la jugada. Inclusive comentĂł que el tumulto se empezĂł a mover un poco despuĂ©s de que al parecer habĂa terminado, con los silbatazos por sonar la jugada se apagĂł muy lentamente.  Â
Â
Pero una vez que declararon oficialmente que los Tejanos se quedaron cortos de la zona de anotación, la euforia por ganar la batalla decisiva en la trinchera se presentó.
Â
"Debido al hecho de que probablemente nunca anotare un touchdown ganador," dijo Dockett, "creo que yo deseo detener el touchdown ganador, especialmente cuando se desarrolla de esta manera."
Â
No es siempre fĂĄcil estar en el epicentro del juego. La NFL especializada y la tendencia a pasar mĂĄs han limitado la participaciĂłn de los gigantes en el centro. Watson y Robinson apenas si jugaron contra los Potros, debido a que los Cardenales figuraron que IndianĂĄpolis pasarĂa continuamente y el coordinador defensivo Bill Davis utilizĂł un paquete "dime" mĂĄs rĂĄpido la mayor parte del tiempo.
Â
Las batallas uno-a-uno nunca acabaran, aunque. A veces, son la diferencia entre ganar y perder.
Â
"Cuando tienes a tu secundaria contra la pared, especialmente de esa forma, no importa como haya sido el juego. Eso decidirĂĄ el partido," dijo Robinson. "Cuando te mantienen al borde de la zona de anotaciĂłn, no hay ninguna otra parte a donde ir. Si cedes una pulgada, esta se magnifica."Â Â Â
 Â
ALGUNOS NĂMEROS
Â
Los Cardenales son por ahora la mejor defensiva por tierra de la NFL, permitiendo solo 71 yardas por juego por tierra.
Â
Los Cardenales juegan siete de sus prĂłximos 10 partidos fuera de casa.
Â
Kurt Warner necesitĂł solamente 113 juegos en la NFL (y solamente 105 como titular) para alcanzar 50 juegos con 300 yardas por pase, sencillamente el mĂĄs rĂĄpido en la historia de la liga. Dan Marino de los Delfines, el mĂĄs, rĂĄpido hasta ahora necesitĂł176 juegos.
Â
Â
En El Epicentro
Los tackles centrales Watson y Robinson saborean las batallas uno-a-uno












