El esquinero novato Jorrick Calvin participando en las actividades organizadas por el equipo el pasado mes.
Conseguir graduarse del colegio es importante para Jorrick Calvin, aunque Ă©l entiende por quĂ© un vistazo rĂĄpido a sus circunstancias puede decir lo contrario. Â
El esquinero, seleccionado en la sexta ronda por los Cardenales en abril, no pudo jugar su Ășltima temporada en Troy por ser acadĂ©micamente inelegible. Esto suena mal, Ă©l lo sabe. Insiste en que ese no es realmente Ă©l. Â
Ăl desea conseguir su titulo â dijo que estĂĄ alrededor de un semestre de distancia de que eso suceda â para su madre. Ya, logrĂł un diploma de escuela secundaria cuando no lo hicieron muchos en su vecindad, y tampoco se esperaba que Calvin lo consiguiera.
"Mi mamĂĄ siempre inculcĂł eso en mi, no puedes lograr nada sin educaciĂłn," dijo Calvin.
No hay ninguna duda que el año pasado fue de aprendizaje para Calvin.
Sus situaciones en troy empezaron en la primavera del 2009. Su tĂa muriĂł y Calvin fue a casa para el funeral. Dos dĂas despuĂ©s del sepelio, su esposo â y tĂo de Calvin â tambiĂ©n falleciĂł. Con el trastorno familiar, Calvin permaneciĂł en casa, y en el proceso, se perdiĂł "una gran tarea" de una de sus clases.
Para cuando Calvin se presentĂł en los entrenamientos para la temporada del 2009, fue informado que su elegibilidad estaba en peligro. Eso no ayudĂł mucho cuando se tomĂł la decisiĂłn final, despuĂ©s de muchas sĂșplicas, dos dĂas antes del segundo juego interescuadras de pretemporada en Troy âCalvin tendrĂa que ser un espectador en su Ășltimo año.
"Como niño uno goza jugando," dijo Calvin. "Cuando te dicen que yo no puedes jugar mĂĄs futbol, eso duele. Es una confrontaciĂłn. Uno debe aprender de la experiencia." Â
Calvin, vio como su sueño de la NFL recibĂa un duro golpe, habrĂa podido ser expulsado de la escuela. Ăl eligiĂł que no, en lugar de eso continuĂł adelante con sus clases y pasaba tanto tiempo que le era posible cerca del equipo (el no podĂa entrenar tampoco). IntentĂł ocupar un lugar en la banca durante los juegos con su vestimenta normal, pero algunas veces se iba en el medio tiempo, incapaz de manejar su inhabilidad de ayudar.    Â
Eventualmente, Calvin saliĂł de la escuela antes de fin de año. Pero habĂa una razĂłn. Su hija, Jorri, naciĂł. Le costĂł tiempo de clases en un futuro prĂłximo, pero fortaleciĂł su creencia en el futuro. Â
"El haberme dicho que no podrĂa jugar fue desalentador, pero mi hija me levantĂł," dijo Calvin. "Me dije a mi mismo, 'Tienes algo por que trabajar ahora.' "
La meta fue un lugar en la NFL.
Con el golpe sufrido en su Ășltimo año colegial, Calvin no iba a recibir una invitaciĂłn al combinado para analistas de talento de la NFL. Se preparĂł para el dĂa de pruebas en Troy, y todo mundo â incluyendo su representante â esperaba simplemente que Calvin pudiera conseguir un lugar como novato no elegido en el draft.
Cuando los Cardenales seleccionaron a Calvin en la sexta ronda, él era el mås sorprendido de todos.
"RecibĂ una llamada de los Cardenales y me dijeron, 'Vamos a seleccionarte,' y yo estaba sĂșper-sorprendido, dijo Calvin. "Estaba impresionado. Mi mamĂĄ estaba impresionada. Todos estaban impresionados, diciendo, 'Lo lograste, no jugaste en todo el Ășltimo año de colegio y aĂșn asĂ fuiste seleccionado porque ellos vieron algo en ti.
"Hasta el dĂa de hoy no estoy seguro (que fue lo que vieron) pero estoy jubilosamente feliz por lo que ellos vieron."
Fueron las habilidades de Calvin para regresar patadas de despeje las que cautivaron a los Cardenales, asĂ como tambiĂ©n la necesidad de un esquinero. El entrenador en jefe Ken Whisenhunt reconociĂł durante las actividades por el equipo que Calvin tiene sus altas y sus bajas en su posiciĂłn, pero aĂșn asĂ ve potencial en la velocidad de Calvin. Â
"Tiene grandes dotes en ese aspecto," dijo Whisenhunt. "La prueba grande para él serå durante el campamento de entrenamiento cuando tenga algunas rivalidades uno-a-uno."
Perderse una temporada de futbol no ayuda. Calvin no estĂĄ fuera de forma, pero dijo que no estĂĄ en forma para el futbol y admitiĂł estar oxidado. No ha vestido las hombreras desde los entrenamientos de aquel lejano verano poco antes de ser declarado oficialmente dado de baja. Â
Posteriormente, él regresarå a terminar su colegio. Es importante para su madre. Es importante para su hija. Es importante para Calvin, también.
Primero, sin embargo a Ă©l le gustarĂa conseguir un puesto en la NFL â que, en caso de que eso suceda, no requiere de un titulo.
"Tengo una oportunidad ahora," dijo Calvin. "Se trata de lo que haga con esa oportunidad."












