Rashad Johnson dio, y recibió.

Al menos, eso es lo que le pasó al safety de los Cardenales, primero en el partido contra Minnesota y luego el pasado fin de semana contra Green Bay. Contra los Vikingos, Johnson estaba protegiendo en una patada de despeje cuando fue penalizado por un bloqueo ilegal por el lado-ciego sobre el ala cerrada de los Vikingos John Carlson. Johnson fue multado después con $21,000 dólares. Después contra los Empacadores, Johnson estaba tratando de cubrir en una patada de despeje cuando los papeles se invirtieron y Johnson fue golpeado por el ala cerrada de los Empacadores Ryan Taylor (foto de abajo).

Esta vez, no se marcó una falta, dejando a los Cardenales incrédulos.

"Estaba sorprendido porque siento como si me hubieran golpeado mucho más duro que en el golpe que yo propiné. Pero ya sabes, árbitros diferentes, opiniones diferentes," dijo Johnson. "Sé que la liga volverá a revisarlo todo y lo que deba suceder, sucederá."

Johnson mencionó lo anterior el miércoles. El viernes, la liga acordó que la jugada de Taylor no fue legal, golpeando a Taylor con la misma multa de $21,000 dólares.

Johnson quedó tendido por un par de minutos después del aparatoso golpe, pero Johnson estaba bien, regresó al partido precisamente en la siguiente jugada en la que equipos especiales participó.

"Me sorprendió un poco," dijo Johnson. "Sólo quería asegurarme de estar bien ya que no quería avergonzarme al intentar levantarme y volver a caer."

– Taylor no fue el único jugador multado en el partido Cardenales-Empacadores. El linebacker de los Cardenales Quentin Groves fue multado con $15,750 dólares por una tackleada estilo "freno de caballo" (horse-collar) al final del partido.

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