El receptor de la Universidad del Sur de Carolina Bruce Ellington, primo del corredor de los Cardenales Andre Ellington, escapa para anotar un touchdown durante un partido contra Kentucky.
Cuando el corredor Andre Ellington fue seleccionado en la sexta ronda del draft de la NFL en Abril pasado, su coordinador ofensivo de la escuela secundaria, Tony Cox, prendiĂł la computadora y de inmediato hizo algunas compras en lĂnea.
No habĂa prendas de vestir de los Cardenales disponibles en Moncks Corner, Carolina del Sur, la ciudad natal de Ellington, asĂ que Cox visitĂł Amazon.com para comprar a su hijo mayor, Gavin, una mochila, una gorra y una camiseta estampada con el logotipo del equipo. Hasta este dĂa, el niño de 7 años de edad, lleva con orgullo su sus prendas de vestir de los Cardenales a la escuela en apoyo a su jugador favorito. Pero pronto, la elecciĂłn se harĂĄ mĂĄs complicada.
"Papå, ¿en qué equipo estarå Bruce?" preguntó Gavin recientemente. "Tendré que conseguir esa gorra, también."
Andre Ellington sorprendiĂł a la NFL como novato, iniciando como un poco-conocido respaldo y terminando como lĂder de la liga en yardas por acarreo. Sin embargo, mientras crecĂa Andre nunca fue considerado el mĂĄs atlĂ©tico en su familia. Ese honor fue otorgado a su primo mĂĄs joven, Bruce Ellington, una estrella en el futbol, pero tambiĂ©n uno de los mejores jugadores de basquetbol del estado.
"Incluso tenĂa algunas habilidades para el bĂ©isbol, tambiĂ©n," dijo Andre. "El talento de Bruce es Ășnico."
Los primos se criaron bajo el mismo techo hasta que Andre tenĂa 11 años y Bruce 9. SolĂan ver juntos deportes en la televisiĂłn y luego correr hacia el patio para emular la acciĂłn. Bruce era mĂĄs hablador, Andre mĂĄs reservado, pero ambos tenĂan un insaciable deseo de competir.
Ambos asistieron a la Escuela Secundaria Berkeley High School en Moncks Corner, y jugaron futbol americano juntos cuando Andre era corredor de Ășltimo año y Bruce receptor de segundo año en el 2007.
La visiĂłn y el atletismo de Andre lo convirtieron en un recluta de alta-demanda, y eligiĂł jugar para Clemson, donde corriĂł para 3,436 yardas en su carrera de cuatro años antes de ser reclutado por los Cardenales. Bruce tambiĂ©n obtuvo el interĂ©s de las escuelas de BCS (siglas en inglĂ©s para Bowl Championship Series), pero los programas universitarios no estaban del todo seguros si elegirlo como defensor profundo o receptor. Y mientras los entrenadores de futbol no se decidĂan, el entrenador de basquetbol de la Universidad del Sur de Carolina Darrin Horn lo puso en acciĂłn en la duela.
Ellington se comprometiĂł verbalmente a jugar basquetbol para los Gamecocks (Gallos de Pelea) durante su tercer año en la escuela secundaria, enfriando el interĂ©s de los programas universitarios de futbol. En su Ășltimo año, se trasladĂł a la posiciĂłn de mariscal de campo y condujo a Berkeley a su primer campeonato estatal desde 1996.
"Se comprometiĂł al inicio (con el basquetbol), asĂ que eso alejĂł a la gente," dijo Cox. "Si hubiera dicho simplemente, 'juego futbol,' habrĂa tenido un gran nĂșmero de ofertas. Ese año en Carolina del Sur Mr. Futbol era (el actual corredor de 49's) Marcus Lattimore, pero Bruce era el segundo. Bruce tuvo un año fenomenal. Fue una carrera muy, muy reñida."
El circuito de basquetbol de verano le permitiĂł a Ellington viajar y relacionarse con sus compañeros de equipo, lo que aumentĂł su amor por ese deporte. Los detractores dijeron que no era lo suficientemente bueno para jugar en una conferencia de alto-nivel, lo que le hizo comprometerse con ese deporte aĂșn mĂĄs.
"Cuando me dijeron eso, pensé, 'Caramba, yo puedo hacer esto,' " dijo.
Ellington fue proclamado como la joya de la corona de los Gamecocks en la generación de basquetbolistas reclutas del 2010," y tuvo un promedio de 12.8 puntos y 3.2 asistencias en su primer año. A pesar de que se trataba de un inicio sólido, guardias-armadores por debajo de los 6-pies de estatura son muy poco comunes en el siguiente nivel, por lo que todo el tiempo Cox estuvo incitåndolo acerca de un regreso a los emparrillados.
"Nunca dejĂ© de insistir con Ă©l sobre el futbol," dijo Cox. "SĂłlo un puñado de personas conocĂan su potencial. Las cosas que hizo en el campo de futbol, ââno se pueden explicar. Cuando estaba en el espacio, hacia cosas que simplemente te dejaban boquiabierto. SabĂa que habĂa un porcentaje (oportunidad) mĂĄs elevado de jugar en la NFL por su estatura. No se ve una gran cantidad de guardias-armadores con 5-9 de estatura en la NBA, pero se ven defensores profundos, receptores abiertos, especialistas en regreso de patadas. Le dije, 'Tienes la capacidad atlĂ©tica para hacerlo.' "
Antes de que iniciara la temporada de basquetbol en su primer año, Bruce fue a un partido de futbol y vio a los Gamecocks vencer a Alabama el equipo nĂșmero 1. AhĂ se plantĂł la semilla, y en la primavera del 2011, le comentĂł a Cox, su deseo calzar sus taquete de futbol nuevamente. Cox inmediatamente se puso al telĂ©fono con el entrenador de receptores de la Universidad de Carolina del Sur, Steve Spurrier, Jr., y las ruedas se pusieron en marcha para la carrera universitaria con dos deportes de Ellington.
"SabĂa que lo lograrĂa," dijo Andre. "Solo que no sabĂa cuĂĄndo."
Bruce terminĂł jugando tres temporadas tanto con el equipo de basquetbol como con el de futbol en Carolina del Sur, con un promedio de 11.2 puntos y 3.0 asistencias en la cancha, mientras que capturaba 106 pases para 1,586 yardas y 16 touchdowns como receptor.
Sin embargo, no fue sino hasta en un destacado partido contra Wisconsin durante el Capital One Bowl en Enero, cuando Ellington supo que estaba dispuesto a renunciar a su Ășltima temporada de elegibilidad y entrar al draft de la NFL. En ese partido atrapĂł seis pases para 140 yardas y dos touchdowns una victoria 34-24 y ahora se proyecta como una selecciĂłn de tercera ronda.
"Ese fue el partido que de alguna manera sellĂł el acuerdo," dijo Bruce. "Yo estaba debatiendo si me quedaba o me iba. DespuĂ©s de tener esa clase de partido, sabĂa a ciencia cierta que me irĂa."
Andre y Bruce se enfrentaron dos veces en su periodo universitario, algo que fue bastante buen espectĂĄculo en Carolina del Sur, y estĂĄn en curso para coincidir en un choque en la NFL. Y aunque es una posibilidad remota, puede darse tambiĂ©n el caso de que se conviertan en compañeros de equipo el prĂłximo año si Bruce es seleccionado por los Cardenales en el draft de Mayo. Andre Roberts es agente libre, por lo que el equipo estarĂĄ buscando un nuevo receptor nĂșmero 3.
Aunque Andre Ellington no ha ido tan lejos como para tratar de promover las habilidades de su primo en la oficina principal, dijo que Bruce serĂa un gran acople en el sistema del entrenador Bruce Arians. Si llegara a suceder, Bruce dijo que quiere portar el nĂșmero 83, un reflejo en el espejo del nĂșmero 38 de Andre.
"Ciertamente es un buen pedigrĂ," dijo el Gerente General de los Cardenales Steve Keim, cuando se le preguntĂł si el equipo estarĂa mĂĄs predispuesto a reclutar a Bruce luego del Ă©xito de Andre.
Sin importar a dónde vaya, Bruce pronto serå jugador de la NFL al igual que su primo mayor, un salto muy grande desde aquellas contiendas en el patio durante la década de los 1990.
"Jugamos juntos gran parte de nuestra vida hasta la escuela secundaria, jugué contra él en la universidad," dijo Bruce. "Nos empujamos el uno al otro para ser lo mejor que podemos ser. Observo las cosas que hace. Me voy a casa lo antes posible para ver la grabación en video, para aprender de lo que él hace. Es un corredor muy råpido y es un gran receptor. También estoy tratando de hacer todo eso."












