El ala defensivo Robert Quinn (izq.) y el tackle defensivo Marvin Austin participando recientemente en el dĂa pro en Carolina del Norte frente a personal de la NFL -- y muchos otros.
Entrenadores de gran renombre estuvieron en los entrenamientos, individuos como Dick LeBeau, Tom Flores y Mike Holmgren, porque Chris Miller todavĂa estaba programado para ser seleccionado en la primera-ronda.
Pero los entrenamientos previos al draft no eran lo mismo que ahora, en donde probablemente ESPN.com hubiera transmitido en vivo a Miller lanzando en contra del viento y con unos locutores analizando su mecĂĄnica. Miller habrĂa entrenando por semanas preparĂĄndose para un dĂa como ese, opuesto a como Ă©l "solo se presentĂł y lo hizo" en 1987.
En el mundo de hoy, Miller probablemente no habrĂa sido abordado por un prominente entrenador que le entregara uno de $50 y le dijera, "Buen entrenamiento. Tomate un par de cervezas que yo pago."
Entre dĂas pro, entrenamientos privados, visitas a las instalaciones de los equipos y el combinado para buscadores de talento, el trayecto al draft se ha transformado enormemente tanto en intensidad como en la profundidad de anĂĄlisis.
"Una de las preguntas que le hice a los mariscales de campo en el combinado fue, 'ÂżEstas disfrutando la experiencia?' " Dijo Miller. "Es difĂcil para los jĂłvenes y es sin-pausa. Para cuando llegan al draft, ellos estĂĄn extenuados."
La bĂșsqueda, como el gerente general Rod Graves la pone, es para "verificar nĂșmeros" â estatura, peso, tiempos en las 40 yardas, de tal manera que las escuelas no puedan hacer minĂșsculos ajustes para favorecerlos â es la razĂłn mĂĄs grande por la que los buscadores de talento solĂan ir a los campus universitarios para un dĂa pro. En aquellos entonces cuando Graves era un buscador de talento para los Osos en la segunda mitad de la dĂ©cada de los 80, los entrenadores casi nunca asistĂan a ese tipo de eventos. La prensa especializada no se interesaba. Los jugadores no se preparaban con tanta intensidad. Â
El combinado en sĂ estaba en pañales, con solo unos pocos de miembros de la prensa asistiendo. Por supuesto habĂa una ausencia de drafts simulados en Marzo como a principios de Abril.
El entrenador asistente de la secundaria de los Cardenales Deshea Townsend, quien graduĂł de Alabama en 1998 antes de finalizar recientemente su carrera en la NFL, asistiĂł a un dĂa pro hace poco. ÂżSu pensamiento? "No recuerdo nada como esto. IncreĂble que nosotros hayamos hecho todo esto."
"Ahora todo se graba en video, yo no recuerdo que me grabaran," expresĂł Townsend. "(Como entrenador), Puedo ver a un individuo entrenar sin ni siquiera estar ahĂ."
Los dĂas pro se han convertido en una herramienta de reclutamiento, dijo Graves, una muestra del programa atlĂ©tico y de motivaciĂłn para los jĂłvenes jugadores de equipos colegiales para que un dĂa puedan destacar por ellos mismos. El dĂa pro en la Universidad del Norte de Carolina contĂł con una numerosa asistencia, expresĂł Graves, parecĂa como si fuera el TazĂłn de los Graduados (Senior Bowl). Miller recuerda asistir al dĂa pro en Texas el año pasado â con Colt McCoy y una serie de prospectos a la NFL â y se sorprendiĂł de ver como se trataba de toda una "producciĂłn." Â
Mayor atenciĂłn no termina con la liga. La cobertura por internet y televisiĂłn han generado docenas de "expertos" en el draft y miles mĂĄs que son aficionados que tienen las vĂas para difundir sus opiniones. InformaciĂłn que alguna vez fue confidencial â o que por lo menos solo estaba relativamente en manos de unos cuantos â ahora estĂĄ al alcance de todo mundo para quien quiera ver (y comentar). Al respecto.
En realidad no afecta a los equipos, dijo Graves. Hay mĂĄs cuestionamientos, admitiĂł. Ya que un mayor nĂșmero de aficionados/prensa estĂĄn implicados en el tema. Pero eso no cambia la forma de como un equipo se prepara para el draft. Los jugadores, sin embargo, deben ver como cada una de sus fallas (o fallas percibidas) son puestas en evidencia, como sus tiempos en las 40 yardas son analizados como ellos alguna vez corrieron las 40 en un juego, asĂ como es considerada su calificaciĂłn en el examen de capacidad cognoscitiva (Wonderlic).   Â
"La presiĂłn es mucho mayor en el jugador," comentĂł Graves.
Graves dijo que continĂșa sorprendido por lo popular que sigue siendo la etapa previa al draft â desde el combinado hasta finales de Abril â o que los Ăndices de audiencia, por ejemplo, sean tan increĂblemente elevados para la cobertura televisiva del combinado en la cadena NFL Networ.
Cam Newton y Blaine Gabbert son nombres populares â si es que no lo eran ya â mucho antes de que su ser asociados a una franquicia de la NFL.
DespuĂ©s de que Miller finalizĂł en OregĂłn, el jugĂł en tres juegos Todo Estrella de postemporada -- el Azul y Gris (Blue-Grey), El TazĂłn de los Graduados (Senior Bowl) y el TazĂłn Hula. Ăl asistiĂł a la versiĂłn del combinado ese año. Luego esperĂł. No habĂa visitas previas al draft por realizar, a pesar de que fue uno de los mariscales de campo de renombre (Miller fue seleccionado en la posiciĂłn 12, Vinny Testaverde fue el No. 1 mientras los Cardenales, con la selecciĂłn No. 6, eligieron al desacreditado Kelly Stouffer).  Â
Tampoco asistiĂł al draft. En lugar de eso, se reuniĂł con aproximadamente 60 familiares y amigos en un lugar de OregĂłn, tuvieron que levantarse a las 4:30 de la mañana â el draft fue el sĂĄbado a las 8 a.m. tiempo del Este, o 5 de la mañana en la costa oeste. En aquel entonces no era un evento en horario estelar. Â
"Hubo mucho movimiento," dijo Miller, "pero nada cercano a lo que sucede hoy en dĂa."












