Los corredores Stepfan Taylor (izquierda) y Andre Ellington se conocieron inicialmente en el Senior Bowl antes de ser reclutados por los Cardenales.
Andre Ellington no sólo estuvo en el campo por ocho jugadas consecutivas, sino que tocó el balón en los ocho (si se incluye la interferencia de pase defensiva contra él), después de su acarreo de seis yardas para colocar a los Cardenales en situación de primera oportunidad en la yarda 4 de Oakland, Ellington salió trotando del campo.
Stepfan Taylor, respaldo de Ellington, suplente en los entrenamientos y amigo, ingresĂł trotando al campo.
"Me di cuenta que lo querĂa," dijo Ellington refiriĂ©ndose al touchdown que Taylor anotĂł en la siguiente jugada. "ActuĂ© como un jugador de equipo en ese momento. Ăl estaba descansado, habĂa estado jugando
bien. Ăl tenĂa hambre. Yo estaba sin aliento, un poco golpeado. TenĂamos piernas frescas por ahĂ."
"Si ese hubiera sido yo, me habrĂa quedado dentro del campo," dijo Taylor, riendo. "No voy a salir del terreno de juego estando al borde de la zona final."
El touchdown que hizo eco en el mundo del fantasy-futbol se produjo en parte porque Ellington quiso premiar a Taylor después de ver a Taylor realizar la mayor parte del trabajo pesado en los entrenamientos todas las semanas mientras Ellington se alivia de un tendón parcialmente desgarrado en su pie izquierdo.
Pero también habla de la amistad entre ellos dos, una que se originó antes de que los corredores fueran incluso reclutados por los Cardenales y que se fortaleció mucho antes de que Ellington le concediera su oportunidad de anotar.
Se conocieron en el Senior Bowl del 2013, jugando para el mismo equipo. Ellington sĂłlo estuvo en unos cuantos entrenamientos antes de tener que retirarse por una lesiĂłn en el bĂceps femoral, pero para entonces Ă©l y Taylor ya habĂan hecho amistad, intercambiando nĂșmeros telefĂłnicos.
Pasaron tiempo juntos nuevamente un par de semanas mĂĄs tarde, cuando asistieron al Combinado para Exploradores de talento de la NFL. Cuando Ellington se convirtiĂł en una sorpresiva selecciĂłn de sexta ronda de los Cardenales â una ronda despuĂ©s de que Taylor fuera seleccionado por el equipo â estos dos amigos estaban juntos de nuevo.
"Fue emocionante, tener la oportunidad de ingresar a la liga junto a un colega que ya conocĂa, con el que ya tenĂa esa amistad, podrĂamos animarnos entre nosotros," dijo Ellington.
Incluso en aquel entonces, Ellington estaba siendo buscado por Taylor. Porque Taylor asistiĂł a Stanford â y debido a los exĂĄmenes finales â no pudo asistir a la primera parte del programa de temporada baja de los Cardenales. El nĂșmero telefĂłnico de Ellington era uno de los pocos que tenĂa, de modo que hasta que Taylor pudo permanecer tiempo completo en Tempe, constantemente le enviaba mensajes a Ellington para mantenerse al dĂa.
"Algunos jugadores podrĂan haber reaccionado de otra manera, pero no, Ă©l siempre fue muy servicial y le dije que yo respetaba eso," dijo Taylor. "Hizo mĂĄs de lo que tenĂa que hacer para ayudarme."
Ante esto, Ellington se encoge de hombros. Dijo que nunca pensó haber hecho algo diferente por Taylor, ya que a esas alturas él ya era su amigo. Es por eso que el gesto del domingo tuvo sentido.
(Aunque Bruce Arians dijo que Ellington estaba "exhausto" cuando saliĂł del partido y Taylor anotĂł, y el entrenador señalĂł que Ellington probablemente no habrĂa conseguido ingresar a la zona de anotaciĂłn como Taylor lo hizo debido a la fatiga.)
En lo que se refiere a Ellington, Taylor estĂĄ haciendo algo mĂĄs que tomar las repeticiones en lugar de Ellington durante los entrenamientos. EstĂĄ proporcionando una ventana al juego de Ellington mientras Ellington toma repeticiones mentales.
Los Cardenales van a seguir apoyĂĄndose en Ellington, incluso mientras sigue batallando con la cuestiĂłn del pie. El mariscal de campo Carson Palmer elogiĂł la tenacidad de Ellington para ser tan efectivo mientras atraviesa por la lesiĂłn, y reiterĂł cĂłmo ve a Ellington al estilo de Jamal Charles que tiene la misma versatilidad explosiva del corredor estelar de los Jefes.
Arians dijo que las 30 ocasiones en las que Ellington tocĂł el balĂłn â 24 acarreos para 88 yardas, 6 recepciones para otras 72 yardas â no fueron demasiadas, aunque reducir los intentos reales de acarreo a 20 serĂa una mejor proporciĂłn.
Taylor también tuvo un gran partido, con 12 acarreos (para 40 yardas) y dos atrapadas (para 19 yardas, y un segundo touchdown.) Por lo general, Taylor ni siquiera se aproxima a esa cantidad de producción, y reconoció que no siempre es fåcil.
MĂĄs acarreos le permitirĂan obtener una mejor idea de su juego, dijo Taylor, y sintiĂł que habĂa perdido el equilibrio en un par de ocasiones porque simplemente no estĂĄ acostumbrado a recibir golpes en un partido. Taylor sĂłlo tenĂa seis acarreos en toda la temporada antes del partido en Oakland.
"Quiero decir, cuando no tiene esas repeticiones, tienes que ver desde la banda y darte una idea, hablar con quién sea que esté dentro del partido y salir al terreno de juego", dijo Taylor.
Por lo general, ese es Ellington, y eso funciona para ambos, independientemente de la forma en la que la carga de trabajo sea distribuida.
"No estĂĄn diciendo que Andre Ellington estĂĄ de 5-1. EstĂĄn diciendo que los Cardenales de Arizona estĂĄn de 5-1," dijo Ellington. "El equipo es importante para mĂ. Entiendo que equipo es lo que se requiere para ganar partidos. Soy un creyente de eso."
Conceder la oportunidad de anotar un touchdown es simplemente algo natural. Especialmente tratĂĄndose de un amigo.
"Ăl estĂĄ relajado y pasĂĄndola bien al mismo tiempo," dijo Taylor, "igual que yo."
"Stepfan es a todo dar," dijo Ellington. "No dejamos que los asuntos del futbol se interpongan entre nuestra amistad. Lo mantenemos simple, como dos grandes camaradas."












