J.J. Nelson todavía habla frecuentemente con John Brown, Jaron Brown y Brittan Golden, a pesar de que ya no son parte del cuadro de receptores de Cardenales.
"Continuamos alentándonos unos a otros, comentamos cuánto nos extrañamos unos a otros," expresó Nelson.
Aunque Nelson tampoco quiere vivir en el pasado. Hay nuevos receptores que se unen a él, a Larry Fitzgerald y a Chad Williams. Francamente, tampoco quiere ser visto como el mismo Nelson.
"Llegar y ser etiquetado como un jugador para balones profundos," explicó Nelson, "he estado tratando de armar el paquete total y siento que esta clase de ofensiva puede ayudarme con eso por seguro."
Velocidad será siempre el principal atributo de Nelson con 5 pies 10 pulgadas y 160 libras. Las habilidades que no se pueden entrenar en un jugador, señaló el entrenador Steve Wilks, son "siempre una ventaja." Y en aquel entonces, cuando Nelson llegó por primera vez y formó parte de un cuerpo de alto rango que incluía a Fitzgerald, los Browns y Michael Floyd, era en su mayoría lo que los Cardenales requerían de Nelson – atraer la parte profunda de las defensas generando espacio donde trabajaran los demás.
Nelson ha querido hacer crecer su juego. Cardenales requieren que consiga eso.
La temporada pasada, con Floyd fuera y John Brown batallando, Nelson parecía que podría convertirse en un sólido segundo receptor detrás de Fitzgerald. Tuvo cinco recepciones en cada uno de los dos primeros partidos de la temporada, además sus 120 yardas y un touchdown fueron una gran razón por la que Cardenales lograron ganar en Indianápolis en la Semana Dos.
Sin embargo, en los últimos 11 partidos de la temporada, Nelson nunca tuvo más de dos recepciones o arriba de 46 yardas en un juego.
"El año pasado es el año pasado," señaló Nelson. "Eso está en el pasado. Tenemos un nuevo cuerpo técnico, un nuevo esquema y un nuevo estilo. Me estoy enfocando en mí mismo."
La oportunidad es bastante buena. Con la partida de todos sus colegas receptores, la competencia de Nelson por el puesto de segundo receptor detrás de Fitzgerald está bastante disponible. Williams, Brice Butler, el novato Christian Kirk y el recién contratado Greg Little, todos figuran para ser parte de la mezcla en el campamento, aunque ninguno se ha convertido en el puntero.
La velocidad de Nelson "encaja en cualquier tipo de ofensiva," indicó el entrenador de receptores Kevin Garver, y eso siempre será utilizado para ventaja de Nelson tanto por parte del jugador como del cuerpo técnico.
"Donde realmente ha crecido durante sus años en Arizona es en sus técnicas fundamentales y lo que se requiere para jugar la posición," agregó Garver. "Velocidad es su calidad, es verdad, aunque también es un receptor realmente bueno y ejecuta rutas realmente buenas."
Nelson acepta la idea de ser una amenaza en lo profundo, especialmente porque puede mantener a los defensores tras él al momento de marcarlo. Ha sido capaz de mostrar habilidades de gran-juego en rutas cortas a lo largo de los años, con un par de jugadas memorables de atrapada-y-corrida contra Seahawks tanto en casa (40 yardas) así como en Seattle (41 yardas) en 2016.
Desea hacer eso más a menudo, incluso si eso no es lo esperado. Eso sin duda sería algo de que hablar con sus ex compañeros de equipo.
"Estar fuera del radar, me gusta eso," explicó Nelson. "He estado así toda mi vida, así que eso no representa nada. Hasta ahora, lo estoy tomando un día a la vez. Creo que estoy haciendo buen trabajo con el sistema. Me están colocando por todas partes."
Images from the final day of minicamp -- and the final day of 2018 offseason work