El nuevo apoyador Lorenzo Alexander(97) charla con Larry Fitzgerald (11) durante el receso de un entrenamiento reciente.

Tal vez fue un poco tonto, Lorenzo Alexander pudo admitirlo, o ingenuo, pero cuando las cosas van bien y uno está haciendo su trabajo de la manera correcta y llegas al juego de Estrellas, la última consideración que uno haría sería jugar para otro equipo.

Así que es por eso que su situación con los Pieles Rojas a principios de esta temporada se sentía como un disparo al estómago, un golpe bajo directo a las emociones. La franquicia que el apoyador externo llamaba casa quería que regresara, pero por nada cerca del dinero o la oportunidad que los Cardenales le estarían ofreciendo.

La lógica dictaba un movimiento hacia el oeste. Y el corazón maneja el desconcierto.

"Cuando has estado en un lugar durante siete años, el lugar donde empecé a jugar así que sentí que mi primer equipo, era mi hogar," dijo Alexander. "Los hijos son parte de la comunidad, Yo soy parte de la comunidad y estamos muy arraigados. A pesar de que sé que es la NFL nunca sentí que alguna vez dejaría ese lugar. Realmente sentí que era el lugar donde iba a jubilarme. Ya sea que esa sea la forma correcta de pensar o no, te quedas atrapado con eso."

Alexander fue elegido al juego de Estrellas en equipos especiales por Washington la temporada pasada. Pero su contrato expiraba, y los Pieles Rojas  – parcialmente maniatados por la NFL – por una sanción a su tope salarial - no fueron capaces de ofrecer lo que ofrecería el mercado abierto.

Eso comenzó con los Cardenales, que finalmente le concedieron a Alexander un contrato por tres años, de $9.5 millones dólares con un bono por firmar de $2.8 millones. Vieron a un veterano que conseguiría liderar, y que podría ser un potencial titular como apoyador externo después de los logros conseguidos en Washington.

"Es lo que llamo un jugador completo," dijo el entrenador Bruce Arians. "Cuando está en el campo se desplaza a 100 millas por hora. El futbol significa mucho para él, es una persona de clase fuera del campo, es genial en los vestidores y ha sido un jugador productivo cuando ha tenido sus oportunidades.

"Sentí que sería genial en nuestros vestidores como líder y lo que aporta como un implacable jugador de futbol."

El negocio es el negocio, Alexander comprendió. Acaba de cumplir 30. Con los problemas en el tope salarial de Pieles Rojas, era una mala combinación, sobre todo para el hombre que tenía la esperanza de permanecer ahí.

"No existe la promesa de un próximo año en este deporte," dijo Alexander. "No podía tomar una decisión equivocada tratando de ser el tipo bueno, estando en este negocio. Es muy intenso."

Ser titular ­– o como lo destaca Alexander, la oportunidad de ganar tal puesto –  intriga. Él había sido titular anteriormente, cuando los Pieles Rojas decidieron cambiar a un esquema 3-4 y estuvo compitiendo contra Andre Carter en la tabla de posiciones. Pero admitió rendimiento bajo, al intentar jugar a con una lesión en el muslo y lo más importante, tratando de jugar en las tres y a veces en las cuatro unidades de equipos especiales en un mismo partido.

Exhausto la mayor parte del tiempo, la producción de Alexander desvaneció. En Arizona, el plan es que Alexander, a pesar de su condición Todo Estrella, se readapte en su juego con equipos especiales asumiendo que es pieza importante de la defensiva.

Pero Alexander, el hombre que lleva consigo la perspectiva que no todos los jugadores de la NFL llevan, no está tratando de dejar atrás su buena posición en equipos especiales. Eso también tiene un lugar especial en su corazón, porque le ayudó a labrarse una buena carrera profesional.

"Como jugador debes ser fiel a ti mismo y comprender dónde encajas en esta liga," dijo Alexander. "No todo mundo puede ser titular. No todo mundo puede ser un (Larry) Fitzgerald o un gran nombre. Tienes que encontrar otra manera de forjar un nombre por ti mismo en esta liga. Si se trata de jugar equipos especiales, aun así  te están pagando y estas generando muy buen dinero y estás de igual forma viviendo el sueño."

Alexander sonrió. No todos los jugadores lo entienden como él, así como reconoció que siendo alguna vez un tackle defensivo no elegido en el draft  de una escuadra de entrenamiento "estuve un tanto forzado a llegar a esa perspectiva."

"A esas alturas," dijo, "el ego ya ha sido derribado y sólo quieres decir, '¿Cómo puedo entrar?' "

"Tienes que estar dispuesto a adaptarte," agregó Alexander, "si la liga te indica que tu plan inicial no va a funcionar."

O, si años más tarde, la liga te indica que tu primer equipo no será su último.