El mariscal de campo de Cardenales Carson Palmer, se mostró desde el inicio de la temporada baja totalmente recuperado y ahora encabeza trabajos de preparación cerca de San Diego previo al campamento de entrenamiento.

Carson Palmer ha estado haciendo entrenamientos adicionales en la parte muerta de la temporada baja – ese lapso después del mini campamento y las actividades organizadas por el equipo, y antes del campamento de entrenamiento – desde que ingresó en la NFL.

Este verano no es la excepción, con el mariscal de campo de Cardenales encontrando un lugar donde poder lanzar, se trata de una escuela secundaria cercana a su casa en el norte de San Diego. Y en ese sentido, Palmer es firme – nada ha cambiado, a pesar de que en esta ocasión se está recuperando de la ruptura del LCA de la rodilla que puso fin prematuramente a su temporada 2014.

Como lo hizo el año pasado, Palmer llevó al receptor John Brown al sur de California para que se hospedara ahí temporalmente mientras se ejercitaba. Y al igual que el año pasado, Palmer siente que está lanzando bien, afilando su juego mental –  y sin experimentar ningún problema con su rodilla.

"Ni siquiera estoy pensando en mi rodilla," dijo Palmer. "Todavía me estoy rehabilitando, simplemente me mantengo en el lado seguro de las cosas, pero ya no necesito estar en rehabilitación. Estoy listo para entrar de lleno al salón de pesas, para ingresar con todo al campo, y mientras no se mencione nada al respecto, no pienso 

en lo que estoy haciendo, sencillamente porque estoy haciendo todo lo que solía hacer."

El grupo no es muy numeroso. Palmer sabe que Julio es el mes en el que los jugadores pasan tiempo con su familia y los entrenamientos a menudo se presentan en el marco del hogar. Es por eso que el receptor abierto de los Cardenales Larry Fitzgerald realiza sus entrenamientos en Minnesota, porque esa es su casa. Es por eso que Palmer está en California.

Sin embargo los jugadores asisten. Brown, que está cerca de Palmer, participa. Las alas cerradas Troy Niklas e Ifeanyi Momah han estado alrededor, al igual que el mariscal de campo Drew Stanton, además Palmer dijo que es posible que Fitzgerald y Michael Floyd todavía puedan participar. El lanzamiento de pases en el campo es sólo una parte; Palmer y los otros también trabajan con Ryan Flaherty y la compañía Prolific Athletes, un centro de entrenamiento popular entre los jugadores de la NFL establecido cerca de Carlsbad California. Algunos defensores profundos de la NFL, incluyendo a Jason Verrett y Jahlell Addae de Cargadores, participan también.

No queda mucho tiempo para el inicio del campamento; "la escuela de mariscales" de Cardenales inicia aproximadamente en dos semanas. Pero este es un momento crucial para mantenerse ocupado, dijo Palmer, por lo que siempre ha organizado este tipo de trabajos.

"Este no es el momento del año en el que estamos tratando de matarnos unos a otros o lanzándonos unos encima de otros," dijo Palmer. "Se trata de mantenerse saludable, pero con el cerebro activo. Es sencillo pasar por las actividades organizadas y el mini campamento y luego apagarse mentalmente. Es importante contar con algunas actualizaciones."

La actividad en el campo depende del día, dijo Palmer. Los primeros días se trataron sobre el enfoque en la protección de pase, y cómo algunas jugadas podrían "romperse en caliente" y el mariscal de campo junto con el receptor deben hacer ajustes visuales. Otro día se trata de la ofensiva sin reunión, la ofensiva de los dos minutos y las formaciones. Después podría haber un enfoque en los esquemas y conceptos de las diferentes rutas.

Se puede cambiar dependiendo de quién esté disponible y cómo se sientan sus piernas luego del trabajo del día anterior. Otras cosas pueden impactar también – Palmer mencionó una ráfaga de viento loca se llevó una de sus hojas de trucos que había dejado sobre el césped del campo mientras lanzaba un pase, elevando las hoja por todo lo alto hasta que desapareció de la vista de todos. En ese caso, Palmer se resignó.

"Estamos tratando de lograr sincronía, tratando de aprender protecciones, estar en la misma página con los demás, de tal manera que podamos jugar con mayor velocidad," dijo Brown.

Siempre perfeccionista, Palmer no tiene que preocuparse por su rodilla una vez que los Cardenales se congreguen de nuevo el 31 de Julio. No quiere preocuparse por los detalles del juego aéreo tampoco.

"Una vez que el campamento de entrenamiento se ponga en marcha, no hay excusa para cometer fallas," dijo Palmer.