Los Cardenales de Arizona consiguieron no solo la primera  victoria en lo que va de la campaña 2009 (incluyendo la pretemporada)  sino que además dieron, creo yo, un trascendental paso en las cuestiones relacionadas con la autoestima de la organización. Al mismo tiempo lograron brindarle un poco --y en muchos casos-- un mucho de tranquilidad a los seguidores del equipo. Personalmente creo que la mayor ganancia obtenida en la victoria frente a los Jaguares en Jacksonville, más allá del los logros comunes –tales como el horario de la costa este y ganar en el camino—es el poderoso hecho de conseguir enmendarse después de una costosa derrota en casa en la semana uno frente a los 49's de San Francisco. Fue muy agradable ver como el equipo al mismo al que en años anteriores  le costaba mucho trabajo reorganizarse anímicamente después de una derrota, dejó atrás lo sucedido en el estadio University Of Phoenix en el partido inaugural. Por supuesto ganar en el camino es fundamental y hacerlo en la costa este lo es aún más,  la ofensiva de los Cardenales es otra cuando los receptores Anquan Boldin y Steve Breaston se unen a Larry Fitzgerald y cuando la línea ofensiva contribuye con el ataque terrestre. El próximo domingo, los Cardenales de Arizona tendrán en un escaparate a nivel nacional, la  fenomenal oportunidad de afianzarse delante de su afición, cuando reciban en el nido a los Potros de Indianápolis en el partido estelar de la función dominical que trasmite la cadena de televisión NBC. El equipo del entrenador en jefe Ken Whisenhunt sabe de antemano que debe  aprovechara bien ésta excelente oportunidad frente a los ojos de toda la nación. Una tarea que ya consiguieron completar en una ocasión, es posible que se puede repetir.