Los Cardenales deberán encontrar la manera de aplicar medidas drásticas contra el corredor de Vikingos Adrian Peterson al cual enfrentarán el jueves por la noche.

Si Adrian Peterson tuviera entre sus quehaceres, una entrevista con los medios de comunicación de Arizona el martes podría no haber sido a través de una conferencia telefónica, sino en los vestidores en el centro de entrenamiento de Cardenales.

La relación del corredor estelar con Vikingos fue estresante durante la temporada baja, derivada a una suspensión por 15 juegos el año pasado debido a una acusación de abuso infantil. Peterson no sintió apoyo alguno de parte de la organización, e hizo su mayor esfuerzo por ser intercambiado – con Cardenales entre sus destinos predilectos.

"Cuando estaba atravesando ese proceso, por supuesto que Arizona era un lugar que llamaba mi atención," dijo el martes

Peterson," especialmente por la clase de temporada que tuvieron el año pasado y por su clima templado."

Peterson es amigo cercano del receptor de Cardenales Larry Fitzgerald, jugador al que admiró cuando estaba en preparatoria. Comentó que siempre se vio jugando junto con él, pero mientras esa idea rondaba su cabeza, Peterson no tenía muchos recursos, Vikingos lo tenían bajo contrato y se mantuvieron firmes en mantener su preciada posesión.

"Al final del día, sabía que me quedaría en Minnesota cuando todo se vino abajo," dijo Peterson.

Con la función de "Thursday Night Football" aproximándose, Cardenales no están soñando despiertos con un Peterson vestido de rojo porque están empleando cada minuto de su tiempo disponible en idear maneras para detenerlo. Vikingos viene a un choque decisivo en la NFC, y todavía a la edad de 30, Peterson se mantiene como uno de los corredores más temidos en la NFL.

Lidera la liga con 1,182 yardas por tierra y promedia destellantes 4.8 yardas por acarreo. Peterson representa el 36 por ciento de la producción ofensiva de Minnesota, fácilmente el mayor porcentaje en la liga.

"Tiene los movimientos giratorios, se detendrá en seco y hará sus cambio de dirección," dijo el entrenador Bruce Arians. "Se formará a 8 yardas y media en la retaguardia, de tal manera que puede ir de hueco-D a hueco-D en cualquier momento. Siempre que toca el balón es una amenaza."

Se le preguntó  a Arians si Peterson podría ser efectivo con 8 defensores en la caja.

"Está rompiendo frentes de nueve hombres," dijo Arians. "Un hombre en el hueco no significa que va a derribarlo."

Peterson tuvo uno de los peores partidos de su carrera la semana pasada en la paliza 38-7 ante los Halcones Marinos, terminando solo con 8 acarreos para 18 yardas. Es único, tanto que incluso ni el más fuerte de los frentes pueda detenerlo.

En su carrera enfrentando a las 5 mejores defensivas contra el ataque terrestre, Peterson promedia 21 acarreos para 108.6 yardas por partido con 15 touchdowns, según detalles proporcionados por NFL Network,  Cardenales son por ahora la defensiva No. 4 contra el juego terrestre, permitiendo solamente 89.0 yardas por partido.

"Al ver las video-grabaciones de él, nos dicen que aún es aquel joven que salió de Oklahoma," dijo el apoyador Kevin Minter. "Aun pasa por encima de algunos y se desase de otros con su brazo de contención. Definitivamente tenemos que encontrar la manera de para a este hombre."

"He estado esperando largo tiempo para jugar contra él," agregó Minter. "Verlo mientras crecía. Y finalmente tener la oportunidad de golpearlo un poco es algo irreal."

La peor actuación de Cardenales frente al acarreo esta temporada fue en la semana 4 en la derrota ante Carneros, cuando Todd Gurley tuvo 144 yardas después del medio tiempo. Pero rectificaron la semana pasada, limitándolo a solo 41 yardas en 8 acarreos y 66 totales para  Carneros.

Arians elogió el trabajo de los siete frontales en esa victoria, con las alas defensivas y apoyadores constantemente volando sobre la retaguardia y haciendo jugadas. Cuatro días después, tienen un desafío aún mayor.

"Todd será un gran jugador," dijo Arians, "sin embargo Adrian es un gran jugador."