El corredor David Johnson anota un touchdown después de una recepción de 10 yardas durante la victoria de Cardenales 27-3 el domingo sobre carneros en San Luis.

SAN LUIS – Chris Johnson y Andre Ellington resultaron lesionados, pero esto consternó poco a Cardenales. Colocar a los corredores David Johnson y Kerwynn Williams en la alineación titular funcionaria. De eso, los Cardenales y el entrenador Bruce Arians estaban seguros. El domingo, los Cardenales corrieron para 175 yardas, Arians describió a Johnson como una versión "joven de Edgerrin James" y comentó que Williams fue el "matador decembrino," y la victoria número 10 llegó con un dominante 27-3 sobre Carneros en el Domo Edward Jones.

"Se incorporaron a lo grande," dijo el tackle Jared Veldheer en relación Johnson y Williams. "Logramos un punto de énfasis que necesitábamos para echar a andar el juego terrestre de nuevo. Estuvo lento el último par de semanas."

Hubo algo de celebración. Los Cardenales (10-2), ganadores de seis en fila, tienen que estar de regreso para jugar el jueves por la noche ante Minnesota (8-4). Sin embargo, esta vez por lo menos es en casa, y los Cardenales saben que pueden conseguir dominio total como el No. 2 de la NFC en su clasificación a la postemporada – y tener

una semana de descanso en la primera ronda – si logran derrotar a Vikingos.

Los Vikingos fueron triturados por Seattle el domingo. Tendrán que atravesar el país para jugar ante unos Cardenales que no jugaron su mejor partido, pero jugaron lo suficientemente bien como para completar la barrida contra rivales de la NFC Oeste en condición de visitante por primera vez desde el 2008 y ganar 10 de sus primeros 12 juegos por primera vez desde 1948.

"Todavía estamos buscando mejorar," dijo Arians. "Debo encontrar razones por las cuales gritarles y asegurarme de que estamos mejorando cada semana. Hay un momento para mirar hacia atrás en el camino y disfrutar, pero todavía no ha llegado, especialmente en una semana con partido el jueves por la noche."

Ayudaría si los Cardenales – que finalizaron con 524 yardas totales en San Luis – pudieran correr de la misma manera. Johnson finalizó con 99 yardas en 22 acarreos, y agregó una recepción de 10 yardas para touchdown. Williams se hizo presente al final del partido y su corrida de 35 yardas hasta la zona de anotación enmarcó sus 6 acarreos (para 59 yardas).

"Bloqueamos mejor," dijo Arians.

Ambos corredores se recuperaron de momentos complicados. Johnson estuvo fantástico, en la forma como enfrentó la carga y corrió bien en la primera mitad, sin embargo la ofensiva se estancó a menudo y los Cardenales solamente lograron liderar 10-0 para medio tiempo.

La segunda trayectoria de la segunda mitad cambió todo, y ambos corredores desempeñaron funciones cruciales en la marcha de 98 yardas que terminó con un touchdown para sellar la victoria ante una deficiente ofensiva de San Luis. La marcha inició en mala posición debido a que Williams soltó el balón en la patada de entrega, consiguió recuperarlo el mismo aunque en la yarda 2.

Preservada por una trascendental atrapada en tercera oportunidad de Michael Floyd, después Williams consiguió un acarreo de 15 yardas para establecerse en franja roja – entonces Johnson soltó el balón. Los Carneros lo recuperaron pero el jugador que se quedó con ella tocó fuera del terreno de juego, permitiendo a Cardenales mantener la posesión. Johnson hizo su atrapada para touchdown en la siguiente jugada.

"Solo hay que intentar dejarlo atrás (el balón suelto), cuando las cosas salen mal, especialmente durante el partido," dijo Johnson.

Williams comentó, "siempre es bueno regresar de esa manera, porque así le muestras a los entrenadores confianza

en ti mismo."

Superaron por mucho al corredor novato de Carneros Todd Gurley. Cardenales buscaban contener a Gurley, después que les corrió para 144 yardas en el primer encuentro, y lo lograron. Gurley consiguió escaparse una vez  para un acarreo de 34 yardas cuando los Cardenales fallaron cubriendo el hueco, a eso le siguió el gol de campo de Carneros. Sin embargo, Gurley solo logró 41 yardas totales en nueve acarreos, y los Carneros (4-8) no iban a ningún lado.

"Me habría gustado que jugáramos un partido perfecto, sin embargo, fue bastante sólido," dijo el ala defensiva Calais Campbell.

Larry Fitzgerald sobrepasó la marca de las 1,000 yardas esta temporada con las 55 yardas que consiguió en ocho atrapadas, recepciones que dicho sea de paso le permitieron alcanzar exactamente 1,000 recepciones en su ilustre carrera. Mientras tanto, Michael Floyd (siete atrapadas, 104 yardas) y John Brown (seis para 113) se desmarcaron además J.J. Nelson tuvo una atrapada para touchdown.

El mariscal de campo Carson Palmer lanzó para 356 yardas, dos anotaciones y cero intercepciones en un partido eficiente. Foles completó solo 15 de 35 para 146 yardas, lanzó una intercepción al profundo de los Cardenales Rashad Johnson y fue abucheado en varias ocasiones durante la segunda mitad.

Los Cardenales terminaron con 29 primeros y diez, mientras que los Carneros solamente sumaron nueve, de esta manera los Cardenales cobraron revancha por la derrota al principio de la temporada contra San Luis, mostrando a la vez que quedarse sin Chris Johnson y Andre Ellington no los detendría.

"No escuchamos a nadie fuera del equipo," dijo Johnson. "Continuamos haciendo las mismas cosas."

Es el juego por tierra el que solamente ayudará en un partido contra los Vikingos, encuentro para el cual los Cardenales ya se están preparando mentalmente a nivel vestidores. Los Cardenales tuvieron un similar gran inicio después de 12 partidos la temporada pasada – 9-3 – aunque "eso realmente no significó mucho," dijo Campbell.

"Es como terminas. Aún queda mucho futbol por jugarse," dijo Campbell. "Mi mente está ahora mismo en Minnesota."