David Johnson corredor de Cardenales echado fuera muy cerca de la línea de gol durante el tiempo adicional el domingo por la noche. Cardenales fallaron un gol de campo dos jugadas más adelante y terminaron empatando 6-6 contra Seahawks.

Frostee Rucker lo negó con su cabeza.

Él ya había estado en un empate en el 2008 cuando jugaba para Bengals, así que no era una nueva sensación mientras Cardenales inexplicablemente empataban con Seahawks, 6-6, el domingo por la noche en el estadio University of Phoenix. Aunque, nuevamente no fue una buena sensación.

"Estamos frustrados," dijo el tackle defensivo. "Jugamos este partido para ganarlo, jugamos intensamente, trabajamos intensamente. Y al final salimos con un empate, sentimos como si hubiéramos perdido el partido, quizá ayude a largo plazo, sin embargo, estamos frustrados y nos hubiera gustado tener 15 minutos más para resolver."

Se debió haber resuelto. El pateador de Cardenales Chandler Catanzaro falló un gol de campo jalando el balón hacia la izquierda en un intento de 24 yardas que debió haber sido para ganar. Por suerte para Cardenales, Steven Hauschka pateador de Seahawks también jaló su intento de gol de campo de 28 yardas hacia la izquierda con solo unos segundos por jugarse.

Si alguna vez un partido merecía terminar en empate, quizá fue este.

Bruce Arians se aseguró de enfatizar que su equipo jugó bien – "no lo perdieron," les dijo – y hubo algunos jugadores que así lo sintieron. El esquinero Patrick Peterson lo llamó "una batalla épica defensiva" e insistió que Cardenales (3-3-1) no puede estar desilusionado con el resultado final.

Aunque por la forma en que Cardenales van detrás de Seahawks (4-1-1) en la NFC Oeste, no significó solamente que fue el primer empate en la NFL desde el 2014 cuando Bengalíes y Panteras empataron a 37. Fue reconocer no haberlo concretado.  

No hubo estadística en la que Cardenales no dominaran. En primeras oportunidades 23 a 11. En tiempo de posesión 46 minutos, 21 segundos contra 28 minutos, 39 segundos. En yardas totales 443 contra 257. El corredor David Johnson sumó 113 yardas por tierra, mientras que el mariscal de campo Carson Palmer acumuló 342 yardas aéreas sin volteretas.

Con todo y eso, Cardenales no lograron entrar a la zona de anotación.

"Una vez que pasábamos la 30 (de Seattle), nos estacábamos," dijo el receptor Larry Fitzgerald.

Seahawks habían logrado solo 130 yardas ofensivas durante el tiempo regular. Sin embargo, debido a que Cardenales solo consiguieron anotar un gol de campo en sus avances a la yarda 21 de Seattle  (intento bloqueado), a la 28 de Seattle (gol de campo de Catanzaro), a la 25 de Seattle (el reloj de juego expiró indicando que el medio tiempo había llegado después que Palmer fue capturado) y a la 19 de Seattle (Johnson fue detenido en cuarta oportunidad), el juego estaba solo 3-0.

No debió haber importado, la forma como Cardenales jugaron a la defensiva. Sin embargo, con menos de 5 minutos por jugarse, Seahawks presionaron con 10 hombres en una patada de despeje de Ryan Quigley y la bloquearon. Recuperando el balón en la yarda 22, la ofensiva de Seattle no consiguió nada aunque sí lograron el gol de campo que empató el partido.

"No sentimos temor ante ellos," dijo el profundo Tyrann Mathieu. "Sabemos que podemos jugarles, es solo cuestión de hacer puntos en su momento y generar las volteretas."

Los equipos intercambiaron goles de campo al inicio del tiempo adicional, obligando a muerte súbita, Cardenales pudo haberlo terminado en varias ocasiones.

La primera fue cuando el receptor J.J. Nelson – desempeñando una función más relevante con John Brown y Jaron Brown lesionados – atrapó un pase frente al esquinero de Halcones Marinos Richard Sherman escapándose 40 yardas. El veloz Nelson parecía que anotaría, pero fue puesto fuera del campo por el profundo Kalcie McCray en la yarda 5.

"Di todo lo que me quedaba en el tanque," dijo Nelson, "pero siento que debí haber anotado. Siento que dejé al equipo abajo, sin duda."

Johnson estuvo cerca de anotar en un acarreo – donde pateo el cono de la esquina frontal, aunque los réferis dijeron que había salido en la yarda 1, Arians después comentó que no estaba seguro porque no fue revisada esa jugada – y después fue detenido en un segundo intento de anotar.

Entró Catanzaro, quien quedó paralizado cuando miró que el balón rebotó en uno de los postes.

"Desde esa distancia no puedes fallar en esta liga," dijo Catanzaro. "No hay excusa."

Cardenales fueron afortunados cuando Hauschka falló su intento, ya que se habría convertido en una derrota crucial. En lugar de esto, fue un semi-crucial empate, cortando la racha de dos victorias consecutivas y ayudo muy poco en la carrera por ganar la NFC Oeste.

"Fue una batalla de la NFC Oeste," dijo Palmer. "Nunca se termina, nunca es fácil."