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El corredor de Cardenales David Johnson corrió 55 yardas hasta la zona de anotación para asegurar la victoria 31-19 sobre Santos el domingo.

Ningún Cardenal se sorprendió. Ninguno, lo cual dice mucho de cómo Bruce Arians mandaba las jugadas y de cómo piensan los jugadores acerca de su entrenador.

Algunos se mostraron asombrados, cuando Arians se fue con Carson Palmer con cerca de seis minutos en el reloj de juego en la victoria del domingo 31-19 en el estadio University of Phoenix, y prometió que el mariscal de campo de los Cardenales se iba a mantener agresivo aún incluso protegiendo una ligera ventaja.

Entonces el momento de la verdad llegó, los Cardenales tenían el balón en su propia yarda 45 con 1:44 en el reloj de juego enfrentando situación de segunda y 8 restándole un solo tiempo fuera a Nueva Orleans, por supuesto habría un pase y no un simple acarreo. Resultado una jugada de 55 yardas de atrapada y corrida por parte del novato David Johnson para sellar el partido, la verdad, solo un poco sorprendente.

"En el automóvil del entrenador Arians, no hay control de velocidad automática," comentó el receptor Larry Fitzgerald. "Siempre debes de tener el pie en el acelerador, y como jugador, a uno le encanta eso."

El encuentro tuvo un buen saldo, incluso después de la lesión de la rodilla derecha del corredor Andre Ellington. Aunque se requieren más análisis, Arians dijo que pensaba que por la manera en la que Ellington se lesionó el ligamento cruzado posterior y por el optimismo que expresó Palmer Ellington estará de regreso en algún momento.

Incluso sin Ellington, Arians se mantuvo agresivo y se fue con el juego por tierra.

"Te encanta ser ofensivo a la ofensiva," dijo Palmer. "Es fácil no serlo."

Los Cardenales ganaron por novena ocasión en 10 aperturas en el estadio University of Phoenix, teniendo un impulso extra al saber que Seattle perdió en tiempo extra ante San Luis.

Los Cardenales (1-0) no estuvieron muy certeros como ellos quisieran. La ofensiva, después de un rápido inicio, se estancó en el segundo y tercer periodo. La defensiva de repente olvidó cómo cubrir a los corredores en jugadas de pase, y hubo algunas otras circunstancias con el personal en el campo – una de ellas fue una penalidad que le costó a Cardenales una anotación.

Pero en este sentido, Arians es como cualquier otro entrenador – es mucho más fácil corregir errores después de una victoria.

"Las cosas que vi son en su mayoría (errores) fácilmente corregibles," dijo Arians.

Palmer terminó con 19 de 37 para 307 yardas y tres touchdowns, conectándose con el receptor John "Smokey" Brown y el

ala cerrada Darren Fells para los otros dos. Fitzgerald lideró al equipo con seis atrapadas para 87 yardas, el juego terrestre brindó 120 yardas en 25 intentos, mostrando respaldo con el veterano Chris Johnson después de que Ellington quedó fuera.

De hecho, hay una diferencia en estos Cardenales del 2015. La lesión de Ellington no pesó tanto a la ofensiva, no con los Johnson haciendo jugadas en el último periodo.

"Es una gran satisfacción saber que (Arians) confía en todos nosotros al momento de hacer nuestro trabajo," comentó David Johnson. "Todo lo que tengo que hacer es correr y no dejar que me atrapen por detrás, así que solo corro por mi vida."

Arians comentó, "Estábamos ansiosos por mandarla (jugada), porque sentíamos que nos iba a dar ese resultado."

Comprar tiempo para la ofensiva fue una defensiva que hizo muchos daño con múltiples pases pantalla de Drew Bress (355 yardas aéreas) pero esto no afectó. Los Santos ingresaron solamente una vez a la franja roja, en la serie que se mantuvo viva gracias a que Tyrann Mathieu no alcanzó a salir del campo antes del despeje.

Dos veces en el último cuarto los Santos (0-1) fueron forzados a patear goles de campo después de haberse desplazado dentro de la yarda 30 de Arizona. En la marcha más importante – Un despeje perfectamente aplacado por Jaron Brown y Justin Bethel en la yarda 3 de Nueva Orleans – la unidad forzó un tres y fuera para preparar la mesa apara la audaz jugada de Arians.

"Hicimos las jugadas que necesitábamos hacer," dijo el esquinero Patrick Peterson.

Ser agresivo no siempre resulta. Pero los Cardenales se mostraron realmente agresivos en al final del primer tiempo, faltando más o menos 7 yardas para entrar en rango de gol de campo cuando Arians mandó un bombazo al novato J.J. Nelson dos veces consecutivas sin tiempo fueras restantes. Ambos fueron incompletos, y cuando Palmer corrió en la siguiente jugada para un primero y diez, el reloj de juego expiró sin la oportunidad de intentar el gol de campo.

Esto pudo haber dolido. Tres puntos más quizá pudieron haber cambiado la decisión de Arians en segunda y 8 con el juego en un hilo.

Pero de igual manera, quizá esto pudo haber sido diferente.

"Eso es algo de lo que hacemos," dijo el tackle derecho Earl Watford.