Michael Floyd (izquierda) y Larry Fitzgerald receptores de Cardenales se abrazan después de un touchdown de Floyd contra Vikingos la pasada temporada.

INDIANÁPOLIS – Hace un año, Cardenales abrieron el Combinado para Exploradores de Talento, esclareciendo su problema más apremiante: Re-estructurar el contrato de Larry Fitzgerald.

El gerente general Steve Keim no tiene tan evidentes problemas este año, aunque eso no quiere decir que no existan futuras situaciones que recapacitar – incluyendo lo que podría suceder con Fitzgerald, y con el cuerpo de receptores del equipo, después de la temporada.

Fitzgerald, que disfrutó de una temporada de renacimiento en el 2015 con una marca personal de 109 recepciones, tendrá su contrato expirando después de la temporada 2016. El contrato de su colega receptor Michael Floyd también se vence después de esta temporada.

La situación de Fitzgerald es más complicada. Cumplirá 33 años antes que inicie la temporada, y en un mundo donde los jugadores de la NFL están recurriendo al retiro, incluso antes de que sus habilidades se hayan erosionado, esa podría ser una opción para Fitzgerald.

"Siempre tengo eso en cuenta," dijo Keim el miércoles. "Todo depende del jugador, todo se reduce hacia donde se está dirigiendo su proceso de pensamiento. ¿Desea Larry jugar uno o dos años más? Probablemente va a evaluar y reevaluar en que condición se encuentra su cuerpo. ¿Cómo se siente él?

"Sé que no hay duda sobre la única cosa que lo impulsa que es ganar un campeonato. No hay duda, en mi opinión, ya es un jugador calibre Salón de la Fama, así que lo que impulsa a Larry Fitzgerald es ganar ese trofeo, ganar ese anillo. Hasta que consiga eso se me hace difícil verlo poniendo punto final, así que espero poder responder esa pregunta este año."

Floyd se recuperó sus dislocados dedos durante el campamento de entrenamiento y de un lento inicio para terminar encendido – tuvo 36 recepciones para 636 yardas y cuatro touchdowns en sus últimos ocho partidos de la temporada. Está programado para ganar alrededor de $7 millones en la opción que incluye su contrato de novato.

Keim señaló que Floyd es "uno de los individuos que estaremos atendiendo" con un nuevo contrato, aunque dijo que nada es inminente.

"Michael ha logrado enorme progresos, sobre todo este último año, no sólo en su conjunto-de-habilidades sino también en su madurez," dijo Keim. "Su ética de trabajo, su pasión por el juego, creo que lo llevó a otro nivel."

A Cardenales les gusta lo que tienen en receptores jóvenes John Brown – que tuvo su primera temporada de 1,000 yardas – y J.J. Nelson. El entrenador Bruce Arians, dijo el miércoles que el objetivo es conseguir que Nelson, el velocista que promedió 27 yardas en sus 11 atrapadas como novato, esté más tiempo en el campo de juego.

Brown fue seleccionado en la tercera ronda en el draft del 2014 y Nelson en la quinta ronda en el 2015. Keim dijo que no descarta utilizar una selección del draft en un receptor por tercer año consecutivo.

"Particularmente cuando sabes que el contrato de Larry expira el próximo año, Michael Floyd está bajo licitación al momento, cuando ves a los respaldos en general moviéndose hacia adelante, surgen algunas preguntas," dijo Keim. "Además, nunca se tienen suficientes buenos jugadores en una posición en particular. Así que si nos encontramos con un joven que pensamos nos puede ayudar, sin duda nos iremos en esa dirección."