El ala cerrada Jeff King se estira para anotar el touchdown en su recepcion de 21 yardas el domingo durante la derrota 22-21 en Washington frente a Pieles Rojas.
LANDOVER, Md. – Un pase con más de 10 minutos por jugarse, no importa que tan bonito o largo sea, no asegura un partido ya de por sí muy cerrado.
Sin embargo, eso es lo que se experimentó el domingo, mientras el mariscal de campo de los Cardenales Kevin Kolb – quien fue vapuleado en una embestida por el linebacker de Pieles Rojas London Fletcher con tal fuerza que hasta su casco salió disparado – lanzó un bombazo de 73 yardas para touchdown a Larry Fitzgerald, extendiendo a ocho puntos la ventaja de los Cardenales.
La sensación era eufórica. Después, en los próximos 10 minutos, la euforia se escurrió de los Cardenales como los diminutos granos en un reloj de arena, mientras los Pieles Rojas se aferraban a un mejor final con una victoria de 22-21 los Cardenales solo sacudían sus cabezas.
"Es nuestra culpa," dijo Kolb. "Lo aceptamos. No hay excusas."
Los Cardenales (1-1) de quedaron cortos después de su visita al estadio FedEx Field, un lugar que siempre parece brindarle a los equipos del entrenador en jefe Ken Whisenhunt juegos muy cerrados pero con final decepcionante.
Una defensiva que había sido maltratada una semana antes contra Carolina sufrió muchos golpes una vez más. Washington (2-0) acumuló 455 yardas ofensivas – 172 por acarreo – y respondieron al touchdown de Fitzgerald con su propia trayectoria de 13-juagas para touchdown. Esa anotación fue producto de un pase de 18 yardas a Santana Moss en cuarta-opotunidad-y-3, jugada que podría haber quedado en el olvido después que los Cardenales consiguieron impedir la conversión de dos puntos desviando el pase.
Si los Cardenales no hubieran arruinado dos trayectorias ofensivas de los Pieles Rojas en la primera mitad durante las cuales lograron penetrar debajo de la yarda 10 – el safety Adrian Wilson interceptó en una, y el ala defensivo Calais Campbell bloqueó un intento de gol de campo en la otra, no habrían podido mantener tan cerrado un juego que no debió haber sido tan cerrado –
"Tenemos que analizar nuestros errores," dijo el esquinero Richard Marshall. "No será fácil, sobre todo después de ver la video grabación de lo que hicimos, pero es algo que tienes hacer, y después sigues adelante."
Más adelante, la ofensiva de los Cardenales, salió para un tres-y-fuera. Los Pieles Rojas avanzaron otras 48 yardas para cuadrar lo que resultaría ser el gol de campo de 34 yardas de Graham Gano para ganar el partido.
Y todavía, los Cardenales tuvieron el balón nuevamente, debajo en el marcador por solo un punto, con 1:45 por jugarse en su propia yarda 20. En la primera jugada, Kolb encontró a Chansi Stuckey para un pase de 12 yardas. Ocurrió un balón suelto, los árbitros marcaron que el balón se le soltó ya estando en el suelo, al mismo tiempo solicitaron una revisión de la jugada – y la pantalla gigante detrás de la zona de anotación mostró a la ruidosa afición lo que querían ver: Que Stuckey había perdido el balón antes de caer.
"Se me revolvió el estómago," dijo Whisenhunt. "Lo vi en la pantalla y experimenté una sensación horrible."
Al final, sin embargo, los Cardenales no se lamentaron del balón suelto de Stuckey en particular porque hubo otras muchas áreas que podrían haber cambiado el resultado del juego de un punto.
La ofensiva funcionó con trancas y barrancas. Los números se ven bien. El corredor Beanie Wells logró 93 yardas y un touchdown en 14 acarreos, aunque estuvo ausente en la primera mitad (seis yardas en solo tres intentos) Kolb completó 17-de-30 para 251 yardas y dos touchdowns, sin embargo su única intercepción se produjo después que los Cardenales habían alcanzado la yarda 24 de Washington.
Los Cardenales no pudieron hacer nada con la intercepción de Wilson, aunque, si lograron anotar después de la intercepción de Marshall, un pase de 21 yardas al ala cerrada Jeff King.
"Tenemos que ser más consistentes," dijo King.
La defensiva sin duda debe serlo. Después de que fue el juego por pase el que los daño contra Panteras, esta vez, fue el juego por tierra, el ex jugador de los Cardenales Tim Hightower (96 yardas en 20 acarreos) y el novato Roy Helu (74 yardas en 10 acarreos) se mantuvieron encontrando el espacio. El mariscal de campo de Pieles Rojas Rex Grossman tuvo por su parte 291 yardas por pase y evitó pérdidas de balón en la segunda mitad.
"La parte buena es que se trata de nosotros," dijo el linebacker Joey Porter. "Sabemos que somos nosotros. Pero tenemos tiempo para arreglarlo. No es el fin del mundo."
Pero fue el fin de la oportunidad de apropiarse de un triunfo en el camino.
"No pudimos cerrar – muchos errores," dijo Whisenhunt. "Pero vamos a aprender de eso."
