La mayoría de las cosas funcionaron para Cardenales exactamente como ellos querían que funcionaran. Las lesiones fueron escasas y menores, y el primer cuadro ofensivo del equipo fue sólido.
Sin embargo, el hecho de que Drew Stanton jugara tan bien (11-de-15 en pases) fue útil. Primero, ayuda a definir de lo que se trata el resto de la pretemporada, y en lo que concierne a los mariscales de campo, define si Blaine Gabbert será alguien para mantener como tercer mariscal en lugar de si será suplente de Stanton como número 2 (de cualquier manera nunca estuvo ni cerca de ser una competencia.) Cardenales realizaron una inversión especulativa en Gabbert para ver si puede ser de valor a futuro. El plan consistía siempre en que Stanton siguiera siendo el mariscal número 2. El equilibrio de Stanton dentro de la bolsa de protección impresionó al sábado. Stanton también elogió al entrenador de fortaleza Buddy Morris y su personal por preparar su cuerpo tan bien, notando que eso ha marcado una diferencia. Cualquiera que sea la razón por la que Stanton tuvo un inicio tan bueno — consiguió tantos pases completos contra Raiders como los que logró durante toda la pretemporada 2016 — Cardenales la aceptarán.
— Lo mismo sucedió con Carson Palmer, que lució firme. Hubo un par de fallas muy cerradas. Cardenales se estarían lamentando bastante si Palmer que se voló ligeramente a un desmarcado Jaron Brown para lo que debería haber sido un touchdown de 46 yardas hubiera ocurrido durante la temporada regular. Aunque el balazo a Brittan Golden para touchdown fue sensacional, y Palmer se manejó bastante bien la bolsa de protección.
— David Johnson, 3 acarreos para 16 yardas. Veremos si Cardenales requieren verlo en lo que resta de la pretemporada. Lució bastante bien.
— Golden es uno de esos individuos que hace bastante difícil la decisión de recortarlo. Tuvo tres recepciones para 44 yardas y un touchdown, y es bueno en equipos especiales.
— Los pateadores no estuvieron ocupados, aunque obviamente recibieron el mensaje del entrenador Bruce Arians. Cada uno despejó sólo una vez. Matt Wile pateó un despeje de 65-yarda (56 netas), Richie Leone uno 61-yardas (45 netas). Las patadas de entrega de Wile también fueron impresionantes toda la noche. De hecho, equipos especiales se desempeñaron bastante bien. Josh Mauro consiguió bloquear un intento de gol de campo y Kerwynn Williams tuvo un regreso de 35 yardas en una patada de entrega y uno de 13 yardas en una patada de despeje. Phil Dawson clavó los dos intentos de gol de campo y los dos puntos extra con bastante facilidad (Wile falló un gol de campo de 46 yardas, aunque reiteramos, él no intentará los goles de campo cuando los partidos cuenten.)
— El apoyador Josh Bynes fue el mejor del equipo con seis tackleadas, dividió una captura, tuvo una tackleada para perdida de yardas, forzó un importante balón suelto y desvió un pase. Es un veterano, es la contratación más reciente, proviene de Lions, fue firmado por lesiones — y uno puede preguntarse si podría estar empujando para un lugar en el plantel. Bynes y Scooby Wright podrían estar compitiendo por un posible lugar.
— Gabbert tuvo mayores dificultades en el segundo partido, aunque en parte eso se debió a la protección de la línea ofensiva, que no aguantó del todo bien. Gabbert fue capturado en cuatro ocasiones. Eso no puede suceder, ni con él ni con la línea.
— ¿Hemos mencionado que el tackle defensivo Robert Nkemdiche está jugando bien? Lo hizo de nuevo el sábado — destrozó una jugada de Raiders en situación de tercera-y-1, y estuvo en el centro para frenar a Raiders en el siguiente intento en cuarta oportunidad — y se puede notar que la confianza está contribuyendo con su ascenso. Si juega bien, la línea estará bien, incluso después de la partida de Calais.
Cardenales descansaron el domingo y regresaron a entrenar el lunes.
