Glendale, AZ. – El State Farm Stadium despidió la pretemporada con un aire de optimismo. Los Arizona Cardinals vencieron 20-10 a los Raiders de Las Vegas en el último ensayo antes del arranque oficial, un partido que dejó más certezas que dudas en el nido.
La chispa del encuentro la encendió Bam Knight, quien en apenas cinco acarreos demostró ser dinamita pura. El corredor acumuló 83 yardas y un touchdown, con una carrera de 67 yardas que rompió el marcador y encendió la grada. Fue la jugada que selló prácticamente la victoria y que recordó a todos que la ofensiva terrestre puede ser un arma de peso en la temporada regular.
Los titulares descansaron, pero la defensa respondió con hambre. El esquema de Jonathan Gannon mostró solidez aun sin sus figuras principales: contención del juego terrestre, presión constante y disciplina en cada serie. El novato Jordan Burch brilló con un sack y un fumble forzado, mientras que Xavier Thomas firmó dos capturas y levantó la mano como parte de un dúo emergente capaz de incomodar a cualquier mariscal rival.
En la ofensiva aérea, Clayton Tune tuvo su mejor presentación de la pretemporada. Conectó para 83 yardas y un touchdown, además de sumar 47 por tierra. Mostró calma, movilidad y efectividad, reforzando su candidatura para tener un papel activo en la rotación.
El triunfo deja a los Cardinals con récord de 2-1 en la pretemporada y un estado de ánimo renovado. La hora de la verdad llegará el 7 de septiembre en Nueva Orleans, cuando Arizona visite a los Saints para el debut oficial.
Por ahora, la victoria ante Raiders deja una fotografía clara: un equipo con jóvenes que responden, una defensa que no baja el pulso y un corredor que puede cambiar partidos en un parpadeo. La preparación terminó; la temporada apenas comienza.
Pero antes de pensar en el Superdome, llega una de las horas más decisivas del calendario: el recorte final al roster de 53 jugadores. La fecha límite es el próximo martes a la 1:00 PM (hora de Arizona), y apenas unas horas después se anunciará a los que conformarán la escuadra de práctica. Ahí estarán muchas de las historias humanas más intensas de la NFL: sueños cumplidos, otros aplazados, todos luchando por un lugar.
Lo mejor ya viene en camino.
